martes, 14 de diciembre de 2010

Historias en Plural II

Este es un capítulo de "Historias en Plural" que escribí hace mucho, pero dadas las circunstancias que están sucediendo en mi país, me parece que vale la pena subirlo ahora. Espero que les guste, y sino, acepto críticas pero aclaro: no soy flexible con respecto a este tema.

"Mi amor, mi cielo:
                                Tengo que decirte que no sé si vas a leer esto. Por egoísta que suene, lo escribo porque lo necesito, mucho más de lo que vos necesitás leerlo. Porque vos estás bien, y vas a estar bien.  Soy yo la única que corre el riesgo de amarte
                                No voy a mentirte. Hace poco que te conozco, pero ya sos lo más importante que tengo y, a pesar de ello, tengo miedo. Tengo miedo porque todas mis seguridades, mis afectos, todo está en juego. Mi mamá me dice que no sos bueno para mí; que me voy a arruinar la vida, como todas las mujeres de mi familia. Mis amigas son aún más tremendistas, si es que eso es posible. Y yo temo, no tanto porque me crea todos sus estúpidos pronósticos, sino porque me cuesta convencerme de que puedo enfrentarme a esto sola. Necesitaría el apoyo que me es negado.
                                Sin embargo, algo tengo claro: ya tomé mi decisión y no voy a dar marcha atrás. Poco me importa lo que digan, o lo que piensen los demás. Yo sé que te amo, que te siento, porque ya sos parte de mí, y que no te voy a dejar ir. Y sé, además, que estoy haciendo lo correcto. Yo no soy una asesina.
                                No, no voy a matarte. Porque, ¡que digan lo que quieran! ¡Que lo nieguen si les hace felices! Lo que me aconsejan es que te mate, tan simple como eso. Pero yo no soy una asesina. Y, además, te amo.
                                No tengas miedo bebé. Voy a luchar por vos. Me voy a enfrentar a las palabras hirientes, a las miradas desaprobatorias, y, sobre todo, al cambio que significa tomar esta decisión. Nada me importa si vos estás bien. Nada me importa más que tu vida ahora.
                                Debo dejar de escribir. Hay muchas cosas por hacer, muchas cosas por hablar. Hay demasiadas cosas por meditar y dejar en claro. Pero te aseguro, mi cielo, mi bebé; te aseguro que vas a vivir. Sos, aunque suene tan raro todavía, mi hijo, y no voy a permitir que nada te pase. Tu vida depende ahora de la mía, y te voy a proteger, te voy a cuidar. Porque somos uno. Porque la idea de tu vida dándole sentido a la mía es tan clara ya, tan real, que te necesito tanto o más que vos a mí. Porque, aún aunque falten meses para que pueda sostenerte en mis brazos, te siento; porque por más diminuto que seas, ya sos hermoso a mis ojos; porque sos real, y sos mío, y te amo. Simplemente por eso.
                                Tengo que dejar de escribir. Se hace tarde, y quedan muchas cosas por hacer. Espero que algún día leas esto, y sepas que te amé desde el primer día.

Tuya siempre
Mamá."


1 comentario:

  1. Lo encontré por ahí, escondido, y es hermoso. Me alegra mucho que una chica como vos, joven, piense asi! Cada vez me horrorizo mas de las muchachas contemporaneas y sus posiciones con temas como estos...

    Seguí asi!

    ResponderEliminar

"Encuentro entre personas y por tanto, de subjetividades, las que se exploran, se invitan al diálogo -espacio de encuentro-y al final se pronuncian creándose mutuamente y así creando mundos completamente renovados". Ayudame con tu subjetividad a crear un mundo nuevo vos también (: